Respiro en tu suspiro
insuflándome vida
al beber de tu boca.
Fluyó por tus venas
aletargada entre tu corazón
viviendo en tus entrañas
anclada entre el va y ven
de tu cuerpo cálido
que me acuna mientas duermo
en la sangre que te quema.
Recorro tu aliento
ávida de tu delicioso olor
como el aire que roza
cada centímetro de tu dura piel,
soy como el agua
que riega tu sistema enloqueciéndote,
deseándote como el elixir más preciado.
Luchamos ambos en una danza
mortal sin tregua,
ninguno cede
ninguno aparta la mirada,
nos acoplamos el uno al otro
no hay unos sin el otro
piel contra piel
siempre hiriéndonos,
siempre amándonos.
Orgullo, traición, dolor
pero siempre tú y yo
en la eternidad...
Nikta
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