Podría gritar hasta no poder más,
gritar hasta quedarme afónica
y nadie me escucharía
desearí poder desaparecer
y perderme por parajes olvidados
adentrarme en profundos bosques
donde more la imaginación
y poder así volar cortando estas ataduras
que amargan mi ser.
Sentir el aire sobre mi espalda
elevando mi espíritu entre las copas
de los frondosos árboles, en la espesura
hasta ser el susurro que se cuele entre
los pliegues de tu alma
como el murmullo del arroyo
impregnando tu corazón con mi dulce canción
ya no habría melancolía, no habría estrés
sólo la voz eterna del mundo
gritando libertad.
Nikta
Cuando el mundo que hemos creado nos sobrepasa hastiandonos aún nos queda la libertad de los sueños y dejar escapar ese grito que carcome nuestras entrañas.
Hermoso como la propia palabra libertad. Tus palabras son tan preciosas como cada pequeña luz de inspiración que hay en el fondo de tu imaginación, de tu inspiración y de tu humilde tierno corazón. No me cansaré de leer tus escritos. Muchos besitos ^^.
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