Marguerit ya se veía como su propia lady Mcbeth y sonreía divertida dando vueltas a la deshojada flor. Pensaba - sólo falta la calabera a un lado y la copa de cicuta al otro.¿Amar o no amar?... ¿a quién entregar mi corazón?. ¿Seguir como estoy o lanzarme del caballo? sin protección alguna por un ciego y loco caballero que puede herirme. Un hombre que parece sordo y mudo ante mis palabras y que no es más que un fiel compañero cuando tengo al más tierno de los amores junto a mi. ¿Lo comodo y sencillo como se debe o la pasión?...- Caprichosa meditaba la dama mordisqueando su cabello deshojando una nueva margarita - ¿Capricho, destino o simple casualidad? La rueda de la fortuna pondra todo en su sitio. Muchos dicen amar, pero pocos lo dicen desde el fondo de su ser y con toda el alma. Amar o no amar... ese es el dilema. ¿Seguir como estoy o tomar las riendas de mi destino - Marguerit suspiro dejando caer el último petalo y dejo perdida la vista contenta con sus diatribas vanas y superfluas sin saber que de muy cerca le rondaba la fatalidad de la muerte.Nikta
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