Esta noche resulta más fría y oscura que nunca...
Cada día se anhela a más gente en este pobre corazón, los hombres caen como moscas en las plantaciones sin que nadie pueda hacer nada. Siembran también las calles con sus cuerpos inertes...pálidos, mientra svemos como se nos va escapando la vida entre las manos sin que la podamos retener.
La soledad se agudiza en este invierno, las marcas en las puertas de las casas proliferan como malos hierbajos, mucho me temo que no habroa cosecha que recoger...
Los carros de la muerte se pasean arriba y abajo atareados mientras otros marcan las calles que quedarán aisladas para que esta plaga no se extienda más allá de los barrios pobres, pero de esta no se escapa ningún hijo de noble ni rey...
Ahora sólo pido a Dios que procure por mi pequeña, que ni siquiera a empezado a vivir... y me perdone por dejarla a merced del destino en el qu epuede que encuentre otra muerte. La alejaré de este país maldito y de estas fantasmales calles, siento como yo también empiezo a sucimbir bajo sus debastadores efectos.
Recuerdo entonces cuando mi padre trabajaba de sol a sol en las mismas plantaciones, esclavizado y en los huesos...soñando con un sorbo de agua y un mendrugo de pan... "los tiempos cambiaran, ya lo vereis" decia... "serán mejores" Pero ya veía con horror el mal de los hombres reflejado en sus ojos, lo que acabaría con todos ellos. Nuestra familía aún salía mejor parada que el resto... sería cosa de qu enuestra piel era más pálida que la del resto...llegaban todos reventados, con la espalda destrozada, la ropa echa jirones y los pies descalzos caminando sobre el agua helada. En verano eso aún se agradecía...los inviernos eran duros y cada año más crudo...sobrevivir como fuera estaba en boca de todos.
Al igual que esas canciones de libertad, qu epretendían infundir algo de esperanza... y que tanto nos negaban, la deuda nunca se saldaba, estabamos condenados. Atados de pies y manos con gruesas cadenas. creo que ya me he desviado del tema... tú mi niña, tendrás otra oportunidad de poder tener una vida mejor que la mía,viajarás hacía la nueva tierra...esa de la luz de la que tanto hablan...
O si no... te daré a algún señor bien aposentado, que te proporcione todo lo que puedas necesitar, pero procura no olvidar nunca hija mía de donde prodeces. Y que lo que tu madre hizo no fue por gusto ni por despecho u odio...pues mi amor es demasiado fuerte como para condenarte a este final. Mas, aunque, esto se solucionara y no enfermaras permaneciendo aquí...caerías bajo ese capataz...que sería peor.
Los huesos ya sienten el cambio de tiempo y las palizas no ayudan a mejorar este viejo y cansado esqueleto.
La lluvia empieza a caer con intensidad... y las paredes de esta casa empiezan a ceder, tendré que buscar otro lado de la casa para no mojarme a causa de las goteras, el viento se cuela por todas partes, y temo que las velas de poco servirán...mientras anochecía rápidamente y todo se sumía en una densa oscuridad. Te miró sonreír alargando tu pequeña y pa´lida manita hacia el fuego que crepita risueño envonlviendote para que descanses en su seno. Que extraño me resulta eso...te rodean tanta socsas que no llego a comprender...como a tu padre. Pero eso ya es trigo de otro costal.
Tu eres tan diferente... y hermosa, tú serñas una luchadora, fuerte y valiente... no podré darte muchos consejos pero espero que aprendas lo mejor...y qu eno te dejes arrastrar hasta hundirte... ya lo comprenderás. Los problemas no son tan graves aveces, afrontalos. Ignoró lo que nos deparará el mañana ni como acabará esta historia...pero por hoy ya he escrito demasiado en este pequeño diario húmedo.
Cada día se anhela a más gente en este pobre corazón, los hombres caen como moscas en las plantaciones sin que nadie pueda hacer nada. Siembran también las calles con sus cuerpos inertes...pálidos, mientra svemos como se nos va escapando la vida entre las manos sin que la podamos retener.
La soledad se agudiza en este invierno, las marcas en las puertas de las casas proliferan como malos hierbajos, mucho me temo que no habroa cosecha que recoger...
Los carros de la muerte se pasean arriba y abajo atareados mientras otros marcan las calles que quedarán aisladas para que esta plaga no se extienda más allá de los barrios pobres, pero de esta no se escapa ningún hijo de noble ni rey...
Ahora sólo pido a Dios que procure por mi pequeña, que ni siquiera a empezado a vivir... y me perdone por dejarla a merced del destino en el qu epuede que encuentre otra muerte. La alejaré de este país maldito y de estas fantasmales calles, siento como yo también empiezo a sucimbir bajo sus debastadores efectos.
Recuerdo entonces cuando mi padre trabajaba de sol a sol en las mismas plantaciones, esclavizado y en los huesos...soñando con un sorbo de agua y un mendrugo de pan... "los tiempos cambiaran, ya lo vereis" decia... "serán mejores" Pero ya veía con horror el mal de los hombres reflejado en sus ojos, lo que acabaría con todos ellos. Nuestra familía aún salía mejor parada que el resto... sería cosa de qu enuestra piel era más pálida que la del resto...llegaban todos reventados, con la espalda destrozada, la ropa echa jirones y los pies descalzos caminando sobre el agua helada. En verano eso aún se agradecía...los inviernos eran duros y cada año más crudo...sobrevivir como fuera estaba en boca de todos.
Al igual que esas canciones de libertad, qu epretendían infundir algo de esperanza... y que tanto nos negaban, la deuda nunca se saldaba, estabamos condenados. Atados de pies y manos con gruesas cadenas. creo que ya me he desviado del tema... tú mi niña, tendrás otra oportunidad de poder tener una vida mejor que la mía,viajarás hacía la nueva tierra...esa de la luz de la que tanto hablan...
O si no... te daré a algún señor bien aposentado, que te proporcione todo lo que puedas necesitar, pero procura no olvidar nunca hija mía de donde prodeces. Y que lo que tu madre hizo no fue por gusto ni por despecho u odio...pues mi amor es demasiado fuerte como para condenarte a este final. Mas, aunque, esto se solucionara y no enfermaras permaneciendo aquí...caerías bajo ese capataz...que sería peor.
Los huesos ya sienten el cambio de tiempo y las palizas no ayudan a mejorar este viejo y cansado esqueleto.
La lluvia empieza a caer con intensidad... y las paredes de esta casa empiezan a ceder, tendré que buscar otro lado de la casa para no mojarme a causa de las goteras, el viento se cuela por todas partes, y temo que las velas de poco servirán...mientras anochecía rápidamente y todo se sumía en una densa oscuridad. Te miró sonreír alargando tu pequeña y pa´lida manita hacia el fuego que crepita risueño envonlviendote para que descanses en su seno. Que extraño me resulta eso...te rodean tanta socsas que no llego a comprender...como a tu padre. Pero eso ya es trigo de otro costal.
Tu eres tan diferente... y hermosa, tú serñas una luchadora, fuerte y valiente... no podré darte muchos consejos pero espero que aprendas lo mejor...y qu eno te dejes arrastrar hasta hundirte... ya lo comprenderás. Los problemas no son tan graves aveces, afrontalos. Ignoró lo que nos deparará el mañana ni como acabará esta historia...pero por hoy ya he escrito demasiado en este pequeño diario húmedo.
Nikta
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